Passer
Me ha dicho el gorrión
que toda mi patética opinión
le importa un plumón.
Sustancial
La importancia
de la apariencia es la esencia
de la insustancia.
Insipiencia
En tiempos busqué el saber;
ahora al fin sé
que nada nunca llegaré a saber.
Komodo
Cada cual usa la realidad
—¿verdad?—
a su gusto y comodidad.
Ya huye
Sal ya de ahí:
no es bueno para ella
ni para ti.
Vitrum
El color del prisma
vira y varía en un baile irreal
como la vida misma.
Refracto
No es algo tan complejo:
es fácil distinguir a un gilipollas,
excepto en el espejo.
Chasca
Gruñía el grillo
en el callejón viejo
su chascarrillo.
Viral
La intransigencia es —recordad—
la más antigua plaga
que infecta a la humanidad.
Zullón
A dios
no pidas permiso para decir
Adiós.
egm.2025
[*En cursiva y entre puntos suspensivos, textos tomados literalmente, con sus rimas, de documentales de naturaleza, doblados, de televisión. En los (sub)títulos hay enlaces.]
Los poetas inmaduros saquean;
los maduros fusilan.
T. S. Eliot
1
Nadie está;
esta noche nadie sale,
nadie vale,
nadie piensa ni vendrá.
∼ Chiggy Top, Not tonight
2
… Un retazo poéticovisual
—de color—
apocalíptico-arrebatador…*
—e irreal—
∼ Basilio Candisque, Matriz y píxel sobre el plano
3
Tu hambre me potencia,
tu impotencia me sacia;
tu saciedad me abre,
tu cerrazón me cura:
tu enfermedad me azuza.
∼ Charles Gustav Young, The tower of positive thinking
4
Si te encuentra —y te muerde—
la esperanza es lo último
que te pierde.
∼ Basil Yskoh, Desperate findings
5
Tus cejas, cornejas;
tus ojos, abrojos.
Tus labios, resabios;
tus besos, excesos.
∼ Mekomo Tutangha, Baisers aux caltrops
6
Chis, no llores:
algunos de mis mejores poemas
son peores
que algunos de tus peores eczemas.
∼ Marcelino Reméndez Pelao, Las cien mil mejores poesías de la literatura universal
7
… Porque los osos hambrientos
—feroces, voraces—
siempre son osos violentos…
∼ Doria Suertes, Estos osos espantosos
8
Extrañolito que arañas
el mundo sin precaución:
una de las tres extrañas
ha de estriarte el esternón.
∼ Antoni Machat i Ruis, Proverbis i cantars LIII
9
Zanjé una zanja, raí una ría;
flipatis flipandis,
saldé la soledad de la naranja
por donde más le exprimía.
∼ Flavia Spremuta, La principessa degli agrumi
10
El uno está contenido en el cero;
esotro,
empero,
el cero está comprendido en el otro.
∼ Alejandra de Hipatia, Matemática incomprendida
11
La amistad causa dolor,
y no menos el amor,
por eso siempre es mejor
un islote acogedor.
∼ Simone Garfunkel, I am a crock
12
… Los saltamontes solitarios
—fornicarios—
se convierten en gregarios…
∼ Heikki Heinäsirkat, Tuntosarvet
13
El primer instante,
el segundo fermión,
el tercer planeta,
el cuarto eslabón,
el quinto simio,
el sexto cabrón,
el séptimo verso
de un poema simplón.
∼ Álvaro Guterres, Esparrame simiano
14
Las hojas del magnolio cuchichean
y susurran las algas en la playa:
«¡La Belle Dame sans merci
te ha tomado —necio— por esclavo!».
∼ Ellis Thorkildson, The goddamess
15
Los hombres no lloran.
El que no llora, no mama.
Ergo: a mamarla a Pharla.
∼ Enrique Salas Zar (Los Churritos), Lágrimas de barrio
16
Loquito (lo quito) por ti, ayer
aguardaba algún hoy,
—alondra atolondrada— pero, a ver,
soy si voy donde doy.
∼ Perce Beyro, Life isn’t a lark
17
… Y es evidente al día siguiente,
después del turno nocturno,
que el nido está bien escondido…
∼ Xan Silveirento, O niño da crica
18
¡Jodido beatón!
¿Sabes? El mundo está bien
chungo. Y tú, en tu sillón.
∼ Jorge Guillado, Beato simplón
19
Viejo engaño, suelo fingir que finjo:
simulo clavar un clavo
mientras finjo que lo desclavo.
∼ Iudas Iz-Kariote, Evangelio pseudoapócrifo
20
Hay un fuego dentro del fuego:
hay un infierno ardiendo
en el valle incendiado;
dice: «Abrásate y calcina conmigo».
∼ David Pynch, Fire burns with me
21
Tal como la noche al día
decolora,
el día a la noche ahora
invadía.
∼ Jim Norrison, Treat on through
22
… Las abejas asan al avispón
—subliteralmente—
sin clavar ningún aguijón…
∼ Álvaro Guterres, Abellas quentes
23
El poema revela, al ser leído,
otro significado
que el que quiso tener al ser creado;
su verdadero —y oculto— sentido.
∼ Viçente Aley Xandre, Poética patética
24
El mirlo celebra el atardecer.
Yo escucho… y callo;
yo no sé nada que no sepa el mirlo.
∼ Steven Wallace, The fourteenth way of looking at a blackbird
25
Inalcanzable, su pelo
de ondas leves,
—inquieta— sus pechos breves
anhelo.
∼ Erza Pounding, Oatthis
26
Cuando me haga viejo
y me disperse loco,
dejadme, ebrio, bajo un tejo,
dejadme solo ante mi espejo
donde a la inepcia invoco.
∼ Desidério da Represa, Encômio da estultice
27
… Sembrando la destrucción total,
las hormigas marabunta
—¿quién pregunta?—
no tienen rival en el reino animal…
∼ Achille Mirmidoni, Formicolio formidabile
28
Si alguna vez fui ducho en amores,
Dolores,
lo aprendí de tus labios —reidores—
mayores.
∼ Joan Monel Terrat, Relucía
29
El día a la noche en hora
dividía,
igual que la noche al día
ya devora.
∼ Henrique Paules Britto, Outra variação sobre o tema de J. Morrison
30
Llega San Juan y arde
—recia madera—
aún el mismo leño
en la misma hoguera.
∼ Heinrich Holzfeuer, Das Brennen der Jahre
31
Sólo en el desierto —en voz alta— digo
mi verdadero nombre,
porque aquí no hay nadie, mujer o hombre,
que pueda arder conmigo.
∼ Dewy Bunniell, A desert with no flame
32
… El cadáver de un venado
ha sido arrastrado
a lo alto de un árbol:
es la presa de un leopardo
de Sri Lanka…
∼ Basil Yskoh, Spotting the leopard
33
Yo te quería,
penuria mía,
y me dejaste la caña vacía
y el alma fría;
hambrienta harpía.
∼ Francesca Scornatti, La canna secca
34
Anotaba en un cuaderno los nombres
de todos sus amantes. Junto al mío
dejó: «Podría haber sido peor…
o bastante peor».
∼ Perce Beyro, Diary of a connoisseur
35
Caparazones de crustáceos crujen
—gamuza, tules—
estrujados bajo mis pies azules.
∼ Carl Bluefoot (The Clenchers), Ballad of the crunching crabs
36
Danza el rodezno en la rueda
de tu molino;
nunca pagó mi moneda
grano tan fino.
∼ Guy-Henri de la Mirandelle, La espiègle meunière
37
… La pantera nebulosa
—quien tal vea, así lo crea—
parecía peligrosa
pero es una madre amorosa…
∼ Enrica Gotterz, Sulla sponda del fiume Schifo (mi sono seduta e ho urinata)
38
Yo la llevé a la playa
creyéndome que era un tío,
y resultó que era paya,
pero igual se apuntó al trío.
∼ Hermerico García Lorza, La cazada infiel
39
Despoetizan los pohetas
que escritan para sus exposas,
sus arnantes o sus novietas.
∼ Iván Román Giménez, Poética apohética
40
(Aún) espero algo;
cada día vuelvo, bebo, salgo,
porque espero algo.
∼ Roberto Enfiesta (Extremochungo), Volver, privar
41
Llega llena de vapores
de arco iris;
todo el aire es de colores;
toda ella es risa y flores,
y arcoíris.
∼ Jagg Richards, She’s a rainarrow
42
… La víbora se desliza
por las húmedas ramas y parece
—incorpórea, escurridiza—
que desaparece…
∼ Wally Stevensen, The bodiless
43
El chamán concibió a los dioses,
y uno de ellos pensó al Hombre;
ahora es el Hombre quien cree
que es él quien ha creado a Dios.
∼ Agustín de Allassi, La descreación
44
Nadie me lee,
nadie me escucha;
nadie se cree
que escribo en la ducha.
∼ John Thorkild Johnsen, Wet writing
45
Tengo —ahora— un plan diferente,
ciertamente genial:
consiste en seguir haciendo lo mismo
para que todo siga siendo igual.
∼ Mekomo Tutangha, Les taches du serval
46
¿Qué es poesía?, dices, mientras juntas
y abres tus piernas arqueando una ceja.
¿Qué es poesía? ¿Y tú me lo preguntas?
Poesía es… tu almeja.
∼ Rodolfo Augusto Quéver, Grima XXI
47
… Y así las sepias usan su sifón
—la energía se invertía—
para crear propulsión…
∼ Wisława Szymsoda, Wołanie do mątwy
48
Deja que los días vengan, olvida
que los días se van:
no podrás ni sospechar de tu vida
—si es que lo hay— el plan.
∼ Maria Rainer-Rilke, Ermüden Elegien
49
Las bicicletas son
—eh— para todo el año;
el amor, el amor
sí es para el verano.
∼ Servando Serván-Pómez, Una bicicleta no hace verano
50
Mitad torero, mitad cowboy:
eso era lo que era,
por eso aún soy quien soy.
∼ Clink Westwood, Far grasslands
51
Tabas serán mis huesos,
mi cráneo, el nido de un ratón,
cuando termine el tiroteo,
cuando la bala regrese al tambor.
∼ Tom Waiter, Satisfying
52
… No es su supervivencia
—allá el río va—
sino la de su descendencia
la que el cocodrilo asegurará…
∼ Shelton Jones, The crocodile twist
53
Insectos, abyectos;
reptiles, febriles;
veloces rapaces, feroces;
y simios eximios,
tan nimios.
∼ Moncho Aldente, Danza de orangutines
54
Avanza y te invade con calma,
y casi sin dolor,
pero una vez dentro del alma,
te sojuzga, el amor.
∼ Pieter Corneliszoon Hooft, Reimitación de Plutarco
55
Yo he escuchado
—sí—
cantar a las sirenas
—cuando huía alzando
mis dentadas pinzas—
y no una a otra:
sí,
cantaban para mí.
∼ Teese Elliot, The king crab and the mermaids
56
Liara, gozosa Liara:
no es que no te quiera, es que eres
una putilla demasiado cara.
∼ Hank Paymaster, Values of Liara
57
… Un destello de color
—tangencial—
como preludio del dolor;
es la defensa letal
de la víbora nauyaca…
∼ Parménides Sugegorrienechea, Letalidad fatal
58
Si todo has de probar
—sin avidez—,
al menos una vez
prueba a chupar.
∼ Paola Collaudatori, La degustazione del tutto
59
—Nunca entiendo una mierda
cuando leo algo de lo que escribes.
—Lo que ya tienes es lo que recibes;
no estira más la cuerda.
∼ Annie Anonymous, Typical net negative comment
60
Escribir poesía:;
explicablemente inevitable;
leer poesía:
evitablemente inexplicable.
∼ Recaredo Reis de Pasoalto, Poética hipotética
61
En sueños
bebo contigo,
en sueños
nunca eres mía;
en sueños
sueñas conmigo,
en sueños
no hay otro día.
∼ Orb Royson, Inn dreams
62
… Y había más pastizales
—se vierte la muerte—
y más manadas de animales…
∼ Chiara Buontempi, Il clima fuggito
63
Mañana en ceño,
el día muerde:
no va la ducha;
de tarde ardiendo:
la noche es mucha.
∼ Tristan Tuzaro, Manifeste humidiste
64
¿A qué dios rezar,
a qué demonio invocar?
¿A qué chamán oír?
¿En qué idioma orar,
en qué lengua blasfemar?
¿A qué dios maldecir?
∼ Enrica Gotterz, La preghiera del desiderio
65
Nidio, croa el cenagal
y es antigua la bebida:
Sabes que te haces banal
en la rima y la medida.
∼ Milda Milst, Dipsómanas
66
Cuando se fue la becaria
puse en su silla un melón
y trasplanté la muscaria
del balcón.
∼ Paco Pighi, Se piró la tórtola
67
… Buscar el lado salvaje
te hace sentir más libre…
Y las chicas negras van:
tu-ru, tu-ru, tu-ru, tu-ru-ru.
∼ Kike Aventurillas, Los archiveros salvajes / Louie Red, A talk on the tall side
68
No me gusta, niña lista,
—porque soy coleccionista—
que falten cromos en tu lista.
∼ Vladimir Kollekov, When the moth cries
69
Nadie me habla,
nadie me escucha;
nadie se mete
conmigo en la ducha.
∼ Hendrik Thorkild Johnson, Solid shower
70
Para orar nunca se tarda
mientras bien alto el cirio arda.
∼ Sorana Inés Delacruz, El cetro de la fe
71
Suelta a tu animal:
—ya cede el sol—
compra más alcohol
y sexo anal.
∼ Leonard Cocken, These presents
72
… La vida de surfera
le ha durado poco
—oh, mar loco—
a la foca cangrejera…
∼ Mar Cachón, Sal rota
73
Chuminante: no hay chumino,
se hace chumino al chingar;
al chingar se hace el chumino,
y al echar la churra atrás
se ve el chumino que nunca
se ha de volver a chingar.
Chuminante: hay más chumino
y más chungas sin chingar.
∼ Antonio Manchado, Protervias y maldades XXIX
74
Pronto;
el tiempo finge:
yo sé los días;
pronto
ya será tarde:
sé de agonías.
∼ Septimio Guerra, Do tempo lusco
75
No recojas del suelo
el poema
que alguien perdió;
déjalo estar
—déjalo ir—, alguien
lo encontrará.
∼ Carlos Grummond Dandrade, Recusa da poesia
76
Clara como una luz
quiero yo verte.
Clara, quiero lloverte
como un alud.
∼ Toribio Turbión, Manual de meteorología alpina
77
… Cuando dos elefantes se pelean
el gran perjudicado es
—barritan y berrean—
el suelo bajo sus pies…
∼ Alfilio Naire, La pisa
78
Hasta la puta entraña
te comería
si no fuera por la lasaña
de a mediodía.
∼ Eluana del Aurentis, Cucina aperta
79
El sistema solo falla
a quienes se han tragado su quincalla;
las desilusiones son
para los que se mean de ilusión.
∼ Rik Van Rijs, The revenge of depression economics
80
Es solo al regresar
cuando brilla la maravilla
que no volverás a encontrar.
∼ Miranda Gertz, Brillavilla
81
Agujas y alfileres
donde te veo
y un frío cosquilleo
cuando más hieres.
∼ Jackie de Shining, No needles or pins
82
… La mayor amenaza para
una manada de lobos
—y ahí no para—
es el ataque de otros lobos…
∼ Clauto, Lupus lupo homo est
83
Puente en madera;
oculto, el mirlo canta
a las libélulas.
∼ Samayō Engumi, クロウタドリ (Kurōtadori)
84
Nadie podrá orinar
dos veces en una misma piscina
porque nadie es el mismo
dos veces en su vida.
∼ Eraclita Defesini, Flusso scuro
85
Un beso verbal
endulza el terror,
directa erección
alivia el error;
un zumo glacial
destempla el sabor.
Rompió la estación:
me tienta el dolor.
∼ Pauline Alaplage, Torture fluide
86
Nací vestida
de sangre y llanto;
muero desnuda
en voz y canto.
∼ Gabriela Tristal, El nudo nervudo
87
… Si el aguijón del escorpión
atraviesa la armadura,
la muerte es segura,
y también la digestión…
∼ Hornero, llíada, Canto XXV
88
Si comprendieras
igual que huyes,
no dividieras
como destruyes.
∼ Fede Cheira, Cheira que fede
89
Punzada y cosquilleo
con que me hieres
—agujas y alfileres—
cuando te veo.
∼ Álvaro Guterres, A comichão
90
Toda mentira es solo una verdad
que ha llegado a su caducidad.
∼ Roberto Alberto Dalberti, La falacia en el diván
91
Oh, anteayer sufrí
un eclipse total de corazón.
¡Oh, qué hermoso espectáculo
fulgurando sobre mi petulancia,
mi enorme presunción!
∼ Perce Beyro, Fatal eclipse of the heart
92
… La relación termina ahí,
y el tiburón macho se aleja
—freno al frenesí—
en busca de otra pareja…
∼ Calypso Algares, Baba de tiburón
93
Colapso
(en un —otro— universo…)
de la función
(… no me he equivocado)
de onda.
∼ Stephen Schrödinger, Tratado de mecánica tántrica
94
No buscaré tu corazón
desamorado:
en algún rincón un ratón
lo ha devorado.
∼ Charles Beaudelire, Souriserie
95
—Lo que no saben los ultracatólicos
es que el demonio en el infierno tiene
un lugar especial tan solo para ellos.
—Ah, ¿pero tú crees en esas cosas?
—Yo no. Pero ellos sí.
∼ Durante da Leggeri, Infernetto
96
Cual la amapola,
ay, trovador:
tócame la vïola
con una mano sola
y a tu sabor.
∼ Violante de Trastámara, Lay de la viola d’amore
97
Te estimo
muy tímidamente
aunque te amo
grotescamente.
∼ Gottfried von Gotterz, Fickengrotte
98
Aunque no quiera, puedo;
quiera o no pueda, sé;
sea o no sepa, ruedo:
sepa o no sea, iré.
∼ Gilda Gilst, Do incontrovertível
99
Yo no existo, pues ahí veo
a otro estar donde yo estoy,
y él no tiene más deseo
que no ser sino quien soy.
∼ Fernando Pessao, Não mijo o que não vejo
100
Y con toda la lencería,
baratijería
y perrería,
que reviente tu poesía.
∼ Karl Brunowski, What matters most is how well you walk under the water as Buddha smiles like flowers at last
101
Sin rencor,
necesito amor
como un poeta una lima
o, mejor,
necesito tanto amor
como un presidiario una rima.
∼ Chikki Pop, Insolation
102
… Sexo en la playa:
focas grises enamoradas;
—raya, recta—
el objetivo es
engendrar la cría perfecta…
∼ Corín Trillado, Fuera de foco
103
Oh dulce, deseable, bello objeto:
un pequeño cerebro
no te hubiera sentado nada mal.
∼ Basil Yskoh, So long blondie bulb
104
Nunca me desanimo,
—¡vida cabrona!—
nada me decepciona:
es todo limo.
∼ Kote Schlammigsten, Meinem schlammig Leben
105
Aunque las putas derrotas
—lucharemos hasta morir
moriremos hasta vencer—;
sean jodidamente eternas.
∼ Gumberto Guerra, Vendedores y vendidos
106
Poeta
a tiempo completo:
prometo
no entrar en tu treta.
∼ Alberto Raphaelli, Baro dall'alba al tramonto
107
… La araña saltadora
es una hábil depredadora;
—sí, joder—
esta extraña araña
es digna de ver…
∼ David Bowed, Las arañas de Orión
108
Me hiciste soñar, y me despertaste
—¡oh, perla adiamantada!—
con un petardo bajo la almohada.
∼ Brais Toxoteso, Canfurna de erros
109
Estoy más allá
de lo que haya más allá
de los límites del tiempo;
el espacio, simplemente,
jamás me encontrará.
∼ Nicole Porter & The Beyonders, Begin the beyond
110
En el pecado está la recompensa
y en la virtud, la penitencia.
∼ Fray Henríquez del Gutambaco, Admonición a los cenizos y atizonados
111
—El mundo está ardiendo de pronto
y solo puede salvarme el deseo…
—Es así como creo
que ya te has convertido en un tonto.
∼ Cris Aisak, Fucked game
112
… Diversas emociones
animales
causan algunas de las mutaciones
más letales…
∼ Mutano Mutabílio, Libar da libelinha
113
¿Cuál es
—un lugar en ti mismo—
el más; cuál es
—una mota en el tiempo—
el menos?
∼ Mies Vanderuhen, Funken der Zukunft
114
Todo lo que aprendí de cada uno
de mis errores
es a nunca reconocer ninguno
de mis errores.
∼ Miranda Geurtier Enríquez, Voz reconocida
115
Cuando empezaste este juego, ni el dado
ni yo éramos quien somos; ahora
incluso el nombre del juego ha cambiado.
∼ Johnny Trick & The Nastgamblers, In the name of the game
116
Y no me gusta
realmente la gente
(tampoco); solo
un poquito —también—
la necesito.
∼ Álvaro Guterres, Gente e gentinha
117
… Los ríos son los portales
por donde los materiales
—cantos, cuántos—
se adentran en el océano…
∼ Mikey Rivers, On material flow
118
Te amo
como el ampli al cable,
como antes
solo había amado
a mi guitarra.
∼ Enrica Gotterz, Nervo ottico
119
—Canta en mi vaso
—reciente luna—, blanca, la sed;
solo el malvís,
que al aire enflauta, sabe qué sed.
—Amante: en tu vaso
derramo mi sed.
∼ Álvaro Chusqueiro, Sedes do meu branco pardal
120
¡Quién se pudiera enredar
en la densa hiedra…
y de nuevo tropezar
en la misma piedra!
∼ Xaquín Cullereiro, Hedras mestas
121
El tintineo
de mis espuelas de plata
se pierde en la tarde;
dame a probar
tu dulce vino de fresas
y encontrarás mi oro.
∼ Lee Hazelnut, Summer spurs
122
… Justo al lado
—aúpa la lupa—
un camarón bandeado
se instalado como ocupa…
∼ Camarón de la Ría, Molando voy
123
El amor
soba su beso,
lo ciega en vicio;
un amor
le vicia el juicio:
sisa su seso.
∼ Guy-Henri de la Mirandelle, Le philosophe dans le bordel
124
¿Debo
comer ese albaricoque?
¿Debo
pensar que puedo
comer ese melocotón?
∼ Tomás Servando Elioto, El bolero de José Alfredo Piedrahíta
125
Pasillos que se bifurcan
y bifurcan,
- abiertas que cerrar,
puertas ┤
- cerradas por abrir.
Cruces, rotondas, calles.
Cuartos. Habitaciones. Cruces.
∼ Diego Armando Forges, El sendero de los jardines que se trifulcan
126
La muerte o el arte;
la chica o el poema:
es —en tal dilema—
mejor masturbarte.
∼ Anne Sextown, Ballad of the furious masturbator
127
Un sombrero sin cabeza
con un pie que no tropieza,
¿qué es?
∼ A. di Vinanza, Agaricales
128
Todo lo demás
estaba antes creado,
por un dios
o por la física cuántica;
solo una cosa es tuya…
Pero te lo diré otro día.
∼ Alberto Coneiro, Os dados que deus te deu
129
Era antes de estar cuerdo,
por lo que dices:
eran tiempos tan felices
que ni me acuerdo.
∼ Manuella Verrückter, Bevor er gesund
130
Verso del tiempo vencido
—humo y hollín—
este adoquín al fin llega a su fin.
∼ Enrico Surgelati, Poetica frenetica
egm.2025
Royo (de I. Bregel y M. del Ojo)
En este chozo perdío
cada uno va a su lío,
menos yo, que voy al mío.
Vidilla
No le digo al poeta que calle
pero, aunque no le sobre erudición,
sí que le falta calle.
Vayemos
—Qué clase de memos que semos.
—¡Pero nosotros no decimos “semos”!
—Bueno, entonces lo semejemos.
Perengano
Me juzgará algún mengano
—aunque yo juego a la billarda—
con su reglamento de balonmano.
Jajují
Otro rupturista
que ignora que la antipoesía
está ya muy vista.
Oxperiencia
En esta lerda inopia
nadie escarmienta en cabeza ajena,
y muchos, ni en la propia.
Verjus
Cual la ligazón en las salsas:
cuántas cosas no nos parecen ciertas
y sin embargo son falsas.
Ñoñada
Tu intentona:
si no emociona,
no funciona.
Gloria (sin excelsis)
Triste escoria,
estamos siempre en el lado incorrecto
de la historia.
Gesta
Si tras la ingesta
algo estridula el grillo,
ya es buena fiesta.
egm.2025
Crispum
Porque eres vil
te azotaré con una rama
de perejil.
Grado (de E. Lynch)
Lo real es ilusión;
realismo y sentido común son
el grado máximo de enajenación.
Epa
No es que no lo sepa:
puede ser que no me quepa
más bajo la chepa.
Gilí
Las pequeñeces
te parecen gilipolleces
porque no creces.
Vacunos
Sabemos lo que sabemos
y no ignoramos más
nada más porque no queremos.
Viga
Sé noble y bueno
aunque la soberbia sea la mota
en ojo ajeno.
Gafancia
El polvo
a la ceniza y el cenizo
al polvo.
Chuletes
Con cobardía
confunden prudencia, e insensatez
con valentía.
Piensador (de D. Gascón / E. Lynch)
Rechace el escritor el aforismo
pues ahí es el lenguaje el que piensa
y no piensa él por sí mismo.
Grafología
- : guion;
− : signo menos;
— : raya.
egm.2025
Púas
Enamoradizo
como un venado; delicado
como un erizo.
Programa
Proposiciones desastradas
que al final serán un desastre
de proporciones desproporcionadas.
Llegada
En aquel huido pasado
estaba todo que estaba yéndose
antes de haber llegado.
Subibaja (de E. M. Rushfeldt)
Aburrirse en los libros y
—quizá—
echar un clavo aquí o allá.
Memismo
Quieras, no quieras,
todos hacemos las mismas memeces
de distintas maneras.
Conocencia
No es el saber
—dijo el connoisseur al sabio—
sino el conocer.
Verídico
Lo cierto y verdad
es que nunca nada es tan cierto
que no tenga un siempre de falsedad.
Quina
Con cariño y sin inquina:
tu cuerpo es un templo
y tu mente una ruina.
Refraneo
Cría ciervos y te sacarán las muelas:
al fin y al clavo saca a otro nabo;
y la vejez, ciruelas.
Chati
Cuánto siento
que no sientas
cuanto siento.
egm.2025
Inmundicia
1. Pie
Porque casi todo ha sido ya dicho,
casi todo ha sido ya escrito
y apenas todo ya antes recontado
corrompido y tergiversado,
todo casi —pediculosamente—
fue alterado y adulterado
y apenas todo ha sido retorcido,
casi todo antes revuelto
y revertido, porque apenas todo
lo que ya ha sido visto y oído
fue apenas todo confundido
falseado o falsificado,
porque casi todo ya fue,
baila la rumba en la punta de un pie.
2. Indiferencia
La depresión que trepamos
a través de la deslumbrante luz,
los charcos que chapoteamos,
de la verdad voluble,
las zanjas en las que yacemos,
y la justicia antojadiza,
el lodo en el que nos hundimos,
el denso precipicio al que arribamos
no son la senda hacia la prometida
victoria al atardecer, y
aunque —preciosa— nosotros miremos
al futuro con gafas de sol
la historia a nosotros nos observa
con sobria y fatigada indiferencia.
3. Sucedió
Inhala en mayo y exhala en abril
—ese mes tan gil—
sobrevive al futuro y sus barrancos,
titánicas fuerzas tectónicas
energéticamente te atraen
hacia los vórtices del pasado,
tensa la muerte diluida la vida,
esto es cierto ahora —o ahora— porque
los cambios de paradigma forzados
por las crisis biológicas sociales
y psicológicas del veinte veinte
son otro tipo de causalidad,
y recuerda que si no lo recuerdas
será algo que jamás sucedió.
4. Sed
Ejércitos acampan en las playas,
bikinis y romances juveniles,
quién sabe lo que el viento jamás trajo
—no puedes elegir no declinar—
en flema se condensa el universo,
el verso se disipa en el poema,
solo el salmo irreverente
sacia la sucia sed de los ascetas
—no tan menos, tan solo más es más—
pues que apenas esto sabrás,
el verso no te explica el universo,
la flema es lo que queda del poema,
recita el tordo en los crepúsculos
el salmo irreductible de su sed.
5. Largo
Mejor menos,
antes lo dijo Baltasar Gracián
en seco endecasílabo
«lo bueno, si breve, dos veces bueno»
[B+b = 2B]
elidiendo el verbo, eso sí,
pero hasta que Mies Van der Rohe
(si bien la frase no era suya)
no popularizó el «less is more»,
esto es «menos es más»
[− = +]
la cosa no estuvo del todo clara
porque en realidad a Gracián
le había quedado un poquito largo.
6. Quebrada
Tú no eres imbécil,
crees que estás diciendo la verdad,
lo crees de verdad tan solo
porque dices lo que crees saber,
nadie quiere ser un estúpido,
nadie cree ser un mastuerzo,
pues guichar suena mejor que follar,
musitó el joven capellán
recién arribado de la meseta,
entonces, quién es ese pato imbécil
que no deja de tocar los cajones,
uy, parece ser que soy yo,
ladra el mastín en el chamizo,
aúlla el lobo solo en la quebrada.
7. Humor
Cómo estamos de vendidos, serás
absuelto de todos tus pecados
pero tus peores errores nunca
nunca te serán perdonados,
condonados ni reubicados
en ningún vano o desván del averno,
incluso reconoce los errores
que jamás hayas cometido,
pues los optimistas serán trincados
en su peor día, sea tu lema
«cada moco con su flema»
y —la verdad— no hay más verdad:
masculla persistente tu inmundicia,
esconde las escamas de tu humor.
Estulticia
8. Infinito
Como una asceta beoda
sigues clamando la causa del todo
y que démones de olvidados evos
traigan algo de integración
—un mito un dogma una teoría—
es irónico —oye— ciencia y magia
conducen a este mismo abismo
y tú sigues regando un rosal seco,
todos los cultos y credos
conducen a un mismo abismo de autismo,
conque aunque sea tan tarde aquí
es temprano en algún lugar del cosmos,
así pues, corazón, dona tu alma
a la ciencia y tu polvo al infinito.
9. Través
Que no te asombren estos historiógrafos
que cuentan la historia al revés
haciendo de la causa efecto
y del efecto través,
después de todo —ya ves—
no sabes cómo te has vuelto tan cínico
ni cómo has podido alcanzar
esa edad que no aparentas tener,
tal vez —ya ves— todo va de través
y, sin desconfiar de nadie,
de nadie debes fiarte, y pues,
como dijo la lumia en su chaise longue,
llegados al fin de la historia
que no te cuelen la historia al través.
10. Negación
Toma todo lo que te estorbe, histórica,
científica o pedestremente
y niega que haya existido,
estulto en su púlpito de culto
el antinegacionista rezonga
sus positivas neonegaciones,
la antimateria gemía jodida
por las grasas grietas del universo,
el paraíso ha sido devastado
por los mismos que inventaron el mito
del paraíso —con temores
se pintan colores— vendidos vamos
confundiendo jayanes con mutantes,
negando hasta la misma negación.
11. Pensar
Sabes —incauto— que no sabes
cómo —ignorante— has llegado hasta aquí,
pero sabes —necia—, mal de ti,
que sabes por qué aún sigues así,
reúsalo úsalo abúsalo,
qué picotea —ignaro— esa paloma
en tu —ingenua— mojado tejado,
semillas —simple— que el viento trae,
grúñelo —cándido— ládralo aúllalo,
semillas —mema— que el viento hurta,
y no sabes —panoli— mal de ti,
ni por qué —ceporro— esto está así, pero
no hay nada como tener un gran líder
que te diga cómo debes pensar.
12. Ahora
En el ahora —o ahora— eres otro,
un algo indefinido que corrige
su estructura —ahora— en efecto
en el desplazamiento al rojo,
bajo la arrugada costra se ocultan
los gestos —ahora— desorientados,
una válvula mal cicatrizada,
propósitos de nueva efervescencia
y —ahora— es tarde o temprano
según cómo te guste ver las cosas,
o no otro ahora sino el mismo
oyendo la canción que canta otro
o —apenas— es demasiado menos
y pronto no serás más que algo ahora.
13. Nadie
En el club de los poetas no-muertos
la bebida es gratis hasta
que te caigas del taburete al suelo
y lamas tus propios vómitos,
en el club de los poetas-espectros
puedes ver cómo se roen sus flacos
huesos despojos yonquis y piltrafas
desequilibradas y alcohólicas
y las putas comen sesos humanos
—descongelados— mientras la sangre
de sus últimos clientes
les chorrea aún por entre los pechos,
en el club de los poetas no-muertos
nadie ha leído los versos de nadie.
14. Ardor
Ella huyó con los jinetes yamnayas,
arcano es el aire del día
e imperscrutable la luz del solsticio,
la verdad es que tal vez la verdad
es la mayor de todas las mentiras
—o acaso catedrático y cateto
no vengan de la misma raíz griega—
tú subraya el error ajeno y niega
el propio hasta el final, que
te digo yo que
no miente más quien conoce que miente
que quien cree poseer la verdad:
martilla con denuedo tu estulticia,
escombra las escorias de tu ardor.
Impudicia
15. Malvendido
Todo dicho, su pensamiento
era tan hondo y profundo,
todo recontado y tergiversado,
que jamás pudo encontrarlo,
en el mito el dogma la teoría,
conque todo ha sido refreído,
todo recocido y recalentado,
—mientras pienso creo que existo—
todo cuasicasualidades, nada
sucede por razón alguna
—vence a tu instinto, sigue tu intuición—
todo totalmente totalizado,
y donde estoy dejadme estar, pues todo
ha sido recomprado y malvendido.
16. Universal
Como música para oídos sordos,
nunca olvido una cara pero
las baratas no recuerdo a ninguna,
mientras yo resabiando iba
en irme a las praderas siderales
que el cosmos no ilumina ni sospecha,
—caídos al fin de la historia—
el barranco en el que nos derribábamos,
el lodo al que nos vencimos,
la lumia se la chupa en su chaise longue
a mendas que apoquinan pero
no pillan su sentido de la historia,
y no se vio un fenómeno tal cual
en todo el universo universal.
17. Desmontar
Toda la vida es demasiado tiempo,
esto lo cambia todo, esto
no cambia conniventemente nada,
no descansaremos ni cuando estemos
vivos —tu duda me la exsuda—
capitán Corto versus doctor Tardo,
solo quería vivir por encima
de mis imposibilidades
pero cada sencilla idea son
la primera original, la segunda
repetición y después tópicos,
y ni un solo guijarro en esta orilla,
tan solo vida, que demuestra
lo que al fin queríamos desmontar.
18. Canción
Obvio, al frente el mar,
sal tempestades y naufragios,
—bikinis y el romance adolescente—
con su monótono rumor,
detrás, oculto, el tordo
que trina con vehemencia entre los pinos,
ávido de una nueva cópula,
el salmo irrefrenable de su sed,
en mitad de entrambos, tú,
quedo y mudo sobre la roca
—espiando el horizonte neblinoso—
entre la playa y el pinar,
cansado de escuchar durante siglos
la misma cosmogónica canción.
19. Occidente
En efecto ese pérfido artefacto
te deja espectralmente estupefacto
en el desplazamiento al rojo,
Hanke Von Geurtriez Ibn Al Mirandí,
ninguna calle llevará tu nombre,
nadie sabrá de ti,
ni habrá nadie que te nombre
—la perfección de la forma imprecisa,
la imprecisión de la forma perfecta—
en las aulas resonantes
ni recuerde tu salmo irreverente,
pero el arte ya no irrita a la vida
ni tú entrarás jamás en la corriente
del arte decumbente de Occidente.
20. Albaricoques
No recuerdas cuándo comiste
tus primeros albaricoques —no
sabes— quizá tu madre te los daba
en mitades, limpios y deshuesados
—ella los llamaba albérchigos—
para que los comieras poco a poco,
ahora es primavera de nuevo
y de nuevo estás comiendo
albaricoques, o albérchigos,
—y aún puedes recrear su sonrisa,
un poco burlona bajo el pañuelo—
carnosos dulces chorreantes,
ni sabes tampoco si serán
estos tus últimos albaricoques.
21. Amor
O quizá lo que ves o oyes u haces
i dices es sinceramente falso,
la verdad es que tal vez la verdad
sea el sueño real de la mentira
—aunque acaso ella no fue raptada
por los jinetes del bronce,
tal vez se la llevó el salobre viento
que se alza al atardecer de las algas—
o bien cuanto haces o dices, oyes
o ves, es solo espuriamente cierto
y es verdad que la mentira
es el color —mendaz— de la verdad:
mastica sin desmayo tu impudicia,
escupe las espinas de tu amor.
egm.2025
Llamarada
El lirio crece,
la amapola florece;
el tiempo escuece.
Ayúdale
El sistema se crea —en su autismo—
y se alimenta a sí mismo,
pero jamás morirá por sí mismo.
Risillas
No eras nadie (ríete),
no eres nada (ríete),
no serás nada ni nadie (ríete).
Entendido
A que esto sí que lo entiendes:
nunca dejes de burlarte
de todo lo que no entiendes.
Troche
Algún reproche cada día
y —tía— como broche
cada noche, ducha fría.
Premonición
Llegará la primavera —no antes—
cuando ella quiera llegar,
ya tú estés aquí… o en otro lugar.
Que-qué
¿No sabes que
no sabes que
no sabes qué?
Mal, mentira y fealdad
Antagonismo estructural:
hater-eco-gene-pos-colonial
contra el orden cultural y moral.
Yagan
Nace,
pace, reprodúcete y
yace.
Quema
—Que te digo yo que esto es un poema.
—Tú lo que tienes es mucha flema.
—Y un eccema donde más quema.
egm.2025
Liquidez
Desde el rocío
hasta el torrente: cada corriente,
distinto río.
Qüita
Lo pasado, ya ha sido;
pero cuánto me arrepiento
de haberme arrepentido.
Majo
Todo tu trabajo
—y tu desparpajo—
a mí me importan un zarajo.
Home
Sumémonos al nuevo vicio
de en vez de “comienzo” o “principio”
decir siempre y solo “inicio”.
Gilibobeces
y tonterías
que tú jamás comprenderías
hago yo todos los días.
Estulta
Muy culta ignorancia
—y rancia— se oculta
sepulta en petulancia.
Aúllos
De las cumbres del glaciar
a los precipicios del mar
¿necesitamos tanto aullar?
Valor
Algo valgo,
porque comparado con nada
todo es algo.
Pugneta
Disputan dos continentes
por la dudosa dignidad
de ser la cuna de la humanidad.
Haz
De lo veraz
a lo falaz
pasando por lo más procaz.
egm.2025
Zonales (de M. Rico)
Raros poetas laterales
en los límites provinciales
de ámbitos territoriales.
Alucinaudio
Ciertamente,
oigo voces
en tu mente.
Ruído contínuo
No por éste, ése o aquél
ni por quién dió, vió ni rió:
ésta mi huída fué sólo por tí.
Tabúes
Cuantas más cosas te prohíban,
más creerás que están en lo cierto
los embaucadores que te guían.
Konceptismo (de C. Nasui)
Alguna vez yo también
quise ser un artista conceptual,
pero ahora ya estoy normal.
Novedad
Reconocer algún error
de vez en cuando
puede ser innovador.
Jiliclistas
En bici y patín vienen,
de noche, y si no llevan luces
es porque bien pocas tienen.
Chof
No te hagas lío:
ya cruzaremos ese puente
cuando caigamos al río.
Analismo
Analistas y expertos
compensan sus muchos graves errores
con algunos ligeros aciertos.
Abandona
Si mi rima
te da grima,
quítatela de encima.
egm.2025
Primero fue el rocío,
paisaje tras la borrasca,
que caía sobre la hierba,
horizontes enteros,
y se filtraba a la tierra,
de intersecciones, vibraciones,
después brotaba el agua,
delimitemos
nuestra área de desastre,
de una umbría fuente,
sobre el mapa de un terreno
devastado durante meses,
y formaba un arroyo,
que entremezclaba,
regato, libélulas,
el fango y la tiniebla,
riachuelo,
pero ya no más de ti,
hasta confluir,
los cauces están difíciles,
con otros arroyos, riachuelos,
y conformar un río,
siento que así lo siento
en este espacio líquido,
no intentes hacerlo bien,
oh torrente arrollador,
hombre, oh hombre moderno,
defectuoso pero fluido
—el tiempo, el tiempo aboya—
sin espacio para existir,
y en algún lugar habrá un mar,
en el que naufragar y ahogarse,
nunca navegarás tan solo,
conque
desde el rocío
a la corriente, en cada puente
distinto río.
egm.2025
Rozno
Es tan burro
que por no entender, no entiende
ni de fúmbol.
Jorobar
Dinero es poder
y poder es poder
comer, follar y joder.
Sintoxis
Palabras enharinadas;
viciositudes del lenguaje:
frases enarenadas.
Ya puestos
Por supuesto:
nunca des absolutamente nada
por supuesto.
Tópicos matices
Blondas atolondradas;
brunas impulsivas;
taheñas arrebatadas.
Lettres (de N. de Lenclos)
De inanición
nunca muere el amor sino más bien
de indigestión.
Patriotitos
Totalitaristas
con pretenciosas ínfulas
redentoristas.
Modisto
Dime qué no se puede enseñar
y yo haré
de modo que se pueda ver.
Glaseo
Cuando la gamba
baila la bamba
hace un frío de caramba.
Marrón
El buen rollito
duró un ratito; el mal rollazo
dura un pedazo.
egm.2025
Plan
Ahora sabes que las llaves
del planeo de las aves
son tan leves como graves.
Filosofada
Nunca pasa nada
que no haya pasado ya;
y si no ha pasado, ya pasará.
Infiriendo
Presta tu atenta atención:
solo podrás equivocarte
cuando llegues a alguna conclusión.
Viso
Es que no es
como yo lo veo ni tú lo ves:
Es que no es.
Quienes (de A. B. Guterres)
De quien partió
ni eco o sombra soy
en quien quedó.
Virtuales
Las virtudes cardinales
son cuatro: norte, sur, este y aquel;
lo miento a flor de hiel.
Patopeya
Poética
épica
patética.
Bufido
Soy un buen bufón,
y en esto no te queda más remedio
que darme la razón.
Clarestía
Las chocolatadas, claras:
no me digas que me amas:
haz solo como si me amaras.
Olvidación
Prefiero el olvido
antes por desagradable
que por aburrido.
egm.2025
Y no me gusta repetir las cosas,
la luna es verde,
lo cierto es que si lo repites
deja de parecer falso, aunque
a mí no me gusta repetir cosas,
la luna es verde,
y cuanto más se acerca
más lejos aparenta estar,
al tiempo que
el tiempo está comenzando a cambiar
y no hay certeza de que lo cierto
no deje de ser falsable,
y no me gusta repetir las cosas,
la luna es verde,
vidrio de seguridad laminado
térmicamente templado,
y el cielo es gratis,
más estable y resistente
que los paneles normales de vidrio,
vira a verano
y si no riegas se seca la hierba
que plantas en el caserón en ruinas,
conque al final resulta que
la luna es verde,
y cuanto más te alejas
más falsa —o mágica— parece ser,
que no me gusta repetir mentiras
ni verdades,
ni la memez tampoco importa
aquí ni acá,
ahora o más tarde allá,
y el cielo es gratis,
el auténtico, el que recorren nubes,
pájaros y estrellas,
por lo que voy a daros
una divertida sorpresa:
nunca me gustó repetir las cosas,
al tiempo, el tiempo es
un lánguido verano
de playa diaria, sexo rutinario
y copas al atardecer,
sin luna verde alguna,
riega pues la hierba
desde la entrada de la casa en ruinas,
ni ahora o más tarde allí
vendrán los dioses a reclamarte
el pago de tasas adicionales
por tus dudosas verdades,
por mis inciertas mentiras,
no me gusta repetir letanías
al amanecer,
deja que el sol emerja,
deja que las constelaciones rueden,
las chicas ya no bailan desnudas
sobre la arena,
otro día, otra historia
que jamás ha de ser mentira
ni verdad,
solo un recuerdo evanescente
entre conchas y algas secas
bajo los pies,
que no me gusta repetir las cosas,
lo digo en serio,
cada vez que contemplas el ocaso
verificas que el tiempo va escurriéndose
por las grietas del horizonte,
pídele otro chintónic
a esa niña tan mona y engreída
del bareto playero,
para deslavar la hora,
las aves van ocupando la arena,
riega las plantitas,
observa la luna verde,
que sí, que la luna es verde
si la sabes bien mirar,
y sobre la montaña
el brillo rojo intermitente
de alguna turbina eólica
girando en la lejana oscuridad,
no querría repetir lo mismo,
porque es que no
me gusta nada repetir las cosas,
creo que ya te había dicho
alguna vez
que todo ha de ser mentira
o verdad
alguna vez,
los ríos de esmeralda en la banquisa,
las dríades que nutren los pinares,
el ojo del dragón sobre las dunas,
nadie sabe ni sabrá,
la luna verdinosa me traslumbra,
sin ironías
ni demasiadas tonterías,
el tiempo ya —sin magia—
pausado va virando hacia el otoño,
pero vendrán otros veranos
para otros,
y mirad que os lo tengo dicho:
que no me gusta, y punto.
egm.2025