11 de febrero de 2018

Domingo impropio


Huele mal en casa
desde la noche del viernes
de las transmutaciones,

este mismo lunes
me levantaré antes
para comprar algunas cosas,

el elixir que revela
lo inerte y lo no visible,
aprendí el truco con el pelo

de aquel tipo extraño
que me cambió un disco,
black skinned blue eyed boys,

por unos cigarrillos sin filtro,
yo era un soldado, herido
por cada último disparo,

la niebla parecía
una incómoda costumbre
local, ahora soy

un hombre sin presente,
vestido de gris, extraviado,
en un vagón de metro

cualquier domingo a mediodía,
en busca, aún en busca
de la transparencia,

en busca, siempre en busca
de la invisibilidad.

.
ēgm. 2018